El suéter

almendras

El suéter

Destapé la caja mientras seguía parado en la silla, quería cerciorarme que tenía la caja correcta. Me habían mandado a bajar la caja de las moñas para regalo, las que guardábamos cada vez que recibíamos un regalo en la familia. Nuestra familia es grande, lo que hacía esta caja se mantenía en constante flujo, moñas entraban y salían constantemente. La caja que abrí no era la caja de las moñas. Era una caja con ropa fuera de temporada. Encima encontré par de gorros de invierno y una bufanda. Estaba apunto de cerrar la caja y regresarla a su lugar cuando debajo de la bufanda vi algo color café almendra. El color muy peculiar, me hizo recordar una imagen mental de mi mamá usando un suéter del mismo color café. Lo raro de esta imagen era que yo no recordaba el lugar donde yo estaba cuando vi a mi mamá con ese suéter. Me bajé de la silla, sosteniendo la caja de ropa invernal. Saqué el suéter y se lo llevé a mi mamá.

—¿Mamá y este suéter?

—¡Ay mijo! Lo que venís a desempolvar. No uso ese suéter desde que nos venimos de Quetzaltenango.

—¿Por qué te recuerdo usando este suéter? Tu estabas parada en frente a un puerta con marco amarillo.

—Las puertas de la casa donde vivíamos cuando tu naciste tenía marcos amarillos. Nosotros nos mudamos para aquí cuando tu tenías unos 7 meses.

—Hmm—. Por un momento me quede pensando si era posible que hubiera tenido una memoria de cuando yo tenía 7 meses de edad.

—Oye. ¿Y la moña que te pedí?


 

Sobre «El suéter»

La memoria no siempre da los resultados que queremos, o esperamos, o verdaderos, o fieles, o muchas cosas más. Lo que si nos dan es ese sentimiento de bienestar cuando recuerdas algún momento grato. La memoria de un suéter color almendra no sé si es real o inventada pero es una de las primeras que tengo.

Sobre la serie «Historias sin futuro»

Para marzo del 2018 les traigo la serie «Historias sin futuro». Una colección de narraciones cortas que describen a personas o situaciones. Estas narraciones las empecé a escribir con la intención de practicar, de ejercitar los músculos creativos y generar un proceso con la esperanza de que se convierta en hábito. Les agradezco su visita y como lo he hice con los post de enero y febrero voy a recopilarlos en un chapbook para que ustedes puedan descargar.

Si quieres descargar Hojarasca, el chapbook de Febrero pincha aquí.

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